Un avión con 431 inmigrantes a bordo del vuelo de la compañía Iraqi Airways ha despegado desde el aeropuerto de Minsk con destino a Bagdad, en lo que sería el primer vuelo de repatriación tras un proceso de registro voluntario.
El Gobierno de Irak ha confirmado que un total de 430 personas embarcaron durante la jornada en el vuelo fletado por el país para evacuar a inmigrantes que se encontraban atrapados en la frontera entre Bielorrusia y Polonia.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraquí, Ahmed al Sahaf, ha hecho hincapié en que «el Ministerio está trabajando duro para dar el mayor nivel de respuesta a estos retornos voluntarios».
En este sentido, recalcó que entre las decisiones adoptadas en consecuencia figuran la suspensión de los vuelos directos a Minsk, si bien incidió en que hay otras personas que viajan al país «desde fuera de Irak, incluidos corredores como Turquía, Qatar, Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Egipto».
Bagdad estima que más de medio millar de iraquíes permanecen en campamentos instalados en las fronteras bielorrusas, donde la tensión va en aumento.
El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, también se ofreció esta semana a organizar aviones de vuelta «a casa» a los inmigrantes y refugiados llegados a su país en las últimas semanas, aunque reconoció que gran parte de estas personas no se planteaban regresar.
