El polémico ministro del Interior de Perú, Luis Barrenzuela, confirmó que trabajo como abogado de Vladimir Cerrón, fundador del partido en el poder Perú Libre, en el caso que se le sigue en la Fiscalía del Estado por lavado de activos. Se acusa a Cerrón de dirigir una organización criminal bautizada por la judicatura como ‘los dinámicos del centro’.
«Fue una prestación de servicios. Soy un profesional del derecho y fui convocado para defender un tema de lavado de activos (del señor Vladimir Cerrón) pero eso no me relaciona, no me vincula…desde esta tribuna quiero resaltar que este humilde servidor no tiene relación alguna con Cerrón ni con los dinámicos del centro», dijo Barrenzuela en radio Exitosa.
«Me aboqué a realizar unas diligencias como abogado (de Vladimir Cerrón) de lavado de activos, mi historial laboral es mas amplio, también soy un experto en crimen organizado, lavado de activos y financiamiento de terrorismo. Me considero un patriota, así como todos los policías peruanos», añadió.
Perú, Bolivia y Colombia son los países considerados como los mayores cultivadores de hoja de coca en el mundo, principal origen de la cocaína. Por esa razón el Gobierno de Estados Unidos desarrolla programas para controlar su erradicación desde hace más de dos décadas en Perú.
A propósito de ello, el ministro del Interior indicó hoy en radio Exitosa que «la hoja de coca no es droga, solo lo es cuando se procesa y se convierte en clorhidrato». Eso sí, Barrenzuela negó de modo tajante que haya suspendido la erradicación de los cultivos de la hoja de coca: «Las erradicaciones siguen, continúan. No hay que desinformar a la población. Este ministro jamás, y lo repito, jamás, ha autorizado tal despropósito porque estaría actuando contra ley. Déjenme trabajar».
El temido equipo judicial que ha investigado a políticos de derecha e izquierda del que forma parte el fiscal Richard Rojas, incluyó a la «persona jurídica Partido Político Nacional Perú Libre»; al líder del partido, Vladimir Cerrón, y al ex primer ministro, Guido Bellido, por aparecer en más de una escucha legal donde busca recolectar 180.000 euros de fianza a favor de Vladimir Cerrón, por el proceso judicial en el que se le condenó por corrupción cuando fue gobernador regional de Junín entre 2011 y 2014.
El pasado fin de semana, la Unidad de Inteligencia Financiera de Perú le congeló las cuentas a la madre del fundador de Perú Libre, Bertha Rojas, que ascienden a 1.5 millones de soles (más de 300.000 euros), a petición de la Fiscalía por presunta irregularidad patrimonial de su hijo, Vladimir Cerrón.
«Para algunos, somos héroes y para otros, somos villanos. Nosotros no somos políticos, lo que hacemos es investigar a políticos que presuntamente han cometido graves casos de corrupción, lavado de activos vinculados a aparatos de gran criminalidad organizada; a ellos nos enfrentamos con transparencia y con pruebas», dijo el fiscal, Rafael Vela.
«El señor (Vladimir) Cerrón está en la cúspide de esa organización criminal. Esa es la hipótesis que se ha fijado dentro de la organización de lavado de activos, es decir, que el partido político (Perú Libre) se crea para ganar el poder, pero a la vez también para captar activos, de tal manera que hay un uso y una instrumentalización de la actividad política. Lo que no quiere decir que las adhesiones o los votantes hayan conocido de este tipo de actividades criminales previas», indicó Vela.
Desde que el presidente Castillo asumió el poder, el fundador de Perú Libre, Vladimir Cerrón, se autoerigió como el poder detrás del poder y desde su cuenta de Twitter alardea, felicita, trollea y anuncia marchas contra el gobierno de su propio partido; dependiendo de que las cosas se hagan o no a su manera. Cerrón lidera la facción de radicales dentro del gobierno que sufrió un golpe rotundo tras la salida de Guido Bellido, pero cuya influencia aún es importante para el ‘presidente del sombrero’, Pedro Castillo.